Asunción, 17 de agosto de 2017
…”los dones y la
llamada de Dios son para siempre” (Rm 11,29).
Estimado P. Linton:
Aunque tu
aniversario sacerdotal fue el día 9 de agosto, memoria de nuestra hermana
teresa Bendecida de la Cruz
(Edith Stein), has querido – significativamente
- celebrar tus bodas de plata en este templo del convento de nuestras
queridas hermanas Carmelitas Descalzas. Y es que en los últimos años, gran
parte de tu vida y tu tiempo, los has dedicado en la restauración total de este
convento, joya de esta ciudad de Cochabamba y tesoro para el Carmelo del
Vicariato Uruguay – Bolivia y Paraguay.
Tus hermanos
del Vicariato reconocemos y valoramos tu empeño y dedicación a todas las obras
que se te han confiado…y se te seguirán confiando! Gracias de Corazón, P.
Linton, por lo que hasta ahora has entregado por la Orden y por la Iglesia.
“Este tesoro lo
llevamos en vasijas de barro, para que todos vean que una fuerza tan extraordinaria procede de Dios y no de
nosotros” (2Cor 4,7). Con gran acierto el apóstol Pablo nos lo expresa que,
efectivamente, este tesoro de la vocación al Carmelo y el sacerdocio lo llevamos en vasijas de barro. Jesús, el
Buen Pastor por excelencia, sabe muy bien nuestra condición de criaturas,
limitadas y frágiles. Y aun así, se fía plenamente de ti y de todos. Cuando más
reconocemos nuestra pequeñez, mas resalta lo que afirma el apóstol Pablo:…para que todos vean que una fuerza tan
extraordinaria procede de Dios y no de nosotros.
En este
sentido viene muy bien la expresión del salmista que te has apropiado en este
tiempo particular, y con razón:”cómo
pagaré al Señor todo el bien que me ha hecho”.
Además de
agradecer a Dios por tu vida y vocación de carmelita, es digno de recordar y
subrayar la fidelidad de Dios en tu
vida en estos 25 años de sacerdote… los
dones y la llamada de Dios son para
siempre: es la constatación del apóstol Pablo y hoy lo estás confirmando
también tú al cumplir los 25 años de vida sacerdotal. La fidelidad de Dios es
una garantía absoluta, por eso mismo, es motivo de profunda gratitud a Dios,
porque su fidelidad y su llamada son irrevocables.
Padre
Linton, yo se que te gusta festejar tus cumpleaños y los de tus hermanos…”y si
hay Mariachis, mucho mejor”. Hoy sobran razones y motivos para celebrar,
las bodas de plata de tu sacerdocio, por eso mismo nos unimos a ti para
aplaudir con júbilo este acontecimiento tan importante para ti para todo el
Vicario. También la Iglesia
local de Cochabamba se une para dar gracias a Dios por tantos dones recibidos
en todo este tiempo. Y que mejor terminar nuestro agradecimiento a Dios, con el
mismo salmista: Señor, tu eres mi alegría
y mi herencia, mi destino esta en tus manos. Me ha tocado un lote estupendo,
¡que hermosa es mi herencia!
¡¡MUCHAS FELICIDADES P. LINTON!!
Fr. Carlos Medina
Vicario Regional
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